Hasta ahora se mantuvo en secreto. Se trata de la explosiva declaración que prestó Juan Ignacio Suris durante el juicio oral por narcotráfico y que LA BRUJULA 24 obtuvo en exclusiva.

Suris, que finalmente fue absuelto como jefe de una banda narco, había declarado a puertas cerradas el 14 de septiembre ante los jueces del Tribunal Oral Federal n°1. La prensa y el público en general fueron desalojados de la sala de audiencias.

El testimonio no debía trascender. 

Sin embargo, ahora LA BRUJULA 24 revela qué dijo el detenido Suris (aún tiene una causa pendiente por asociación ilícita fiscal) sobre sus actividades ilícitas y su connivencia con empresarios y funcionarios públicos. Y hasta en un momento, pareció enviarle un “mensaje” a algún político en particular.

“Yo me hago cargo de todo lo que me quieran hacer cargo. He negreado plata. He vaciado empresas. Me he dedicado al lavado de dinero. He comprado combustible en Viedma que iba para el sur y lo desviaba para Bahía Blanca. He hecho 10 mil negocios y me hago cargo de todo, pero nunca traje droga. Si hubiese querido podría haber traído droga porque los conozco a todos pero no me interesa. Y tengo la plata, los medios y la capacidad para hacerlo. Pero no me interesa porque no es rentable. Mis otros negocios son más rentables que vender droga”, sostuvo Suris, a modo de introducción, en un pasaje de su declaración.

Sobre la corrupción policial y sus “negocios” con la compra de combustible, Suris especificó: “Yo siempre use las herramientas que el sistema me daba. Por ejemplo, el combustible una vez que lo tenía acá, lo respaldaba con una facturación. Trabajaba con la empresa Surdata. Además, el combustible no tiene número y los controles camineros no estaban cuando pasaba el camión. Hay toda una connivencia policial”.

PRÉSTAMOS DE DINERO, SOBREFACTURACIONES Y EL "NEGOCIO DE LA PUBLICIDAD"

Sobre este punto, el detenido explicó: “Si yo presto un millón de pesos, el mes que viene tengo otro millón de pesos: facturándolo, triplicándolo. Le facturaba 5 a 1 a los autos de carrera. Tengo trato con las principales agencias de publicidad de Buenos Aires, tenía la productora adentro de Ideas del Sur, le he hecho los contratos de Polacrín a Ideas del Sur. También trabajo en Canal 13”. 

“Siempre use las herramientas que el mismo sistema me da. Si hay una ley, (los políticos) no se la van a hacer para acorralarse solos, siempre hay una salida”, señaló ante el tribunal oral.

También apuntó a las empresas que le compraban facturas y que hasta hoy no fueron acusadas por la Justicia. “Si yo soy culpable por la asociación ilícita tributaria: ¿Dónde están las 120 empresas que me compraron facturas que estuvieron en connivencia para que les preste dinero y hagamos la tramoya bancaria?

CORRUPCIÓN EN LA AFIP

Suris también se refirió a su supuesto vínculo con gente de la entidad recaudadora. “He tratado con mucha gente de la AFIP. El día que me hicieron el allanamiento yo me presenté y cuando veo a los que hacían la auditoría eran todos unos terribles delincuentes. Vos me vendés el formulario CETA, vos te robás los talonarios y me los vendés, vos hablás con este y te acostás con la mujer de aquel. Y cuando me preguntaron por 2 millones que me figuraban, les dije 'son los que le di a tu jefe en mano'”.

LA POLITICA INVOLUCRADA

En uno de los tramos más tensos de la declaración, Juan Ignacio Suris hizo gala de sus contactos gubernamentales al confesar que realizó “contratos para recuperar subsidios de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (ONCCA)”.

“Y si vamos a hablar, hagámoslo a calzón quitado. Yo no soy un santo pero hay feedlots de políticos que nunca aparecieron, de diputados, de senadores. Que ellos no vengan a hablar como puritanos, porque la campaña, de sus bolsillos no la pagan”, finalizó Suris en una especie de “mensaje”, dando a entender que tiene mucha más información de la que ventiló ante el tribunal federal.

La declaración de Juan Ignacio Suris se extendió casi dos horas. Otros segmentos significativos de su relato, los puede ver en los siguientes videos.

Fuente: La Brújula 24